El trenzado más fino y natural para una alfombra de vinilo ultra resistente
Esta alfombra de fibra sintética o de vinilo trenzado presenta un acabado finísimo y con un aspecto realmente espectacular.
Combina fibras muy finas trenzadas de un modo que le confieren una naturalidad y calidez que nada tiene que envidiar a cualquier alfombra de fibras naturales. Pero, a la vez, el estar fabricada con polipropileno le otorga una resistencia, polivalencia y durabilidad extraordinarias.
La alfombra para interior, exterior, o donde haga falta
La resistencia y durabilidad es la seña de identidad de las alfombras vinílicas. Por eso son válidas para interior, terraza o exterior, para salón, dormitorio o donde haga falta; en cualquier lugar encuentra acomodo y hace un servicio eficaz y decorativo. Con varias medidas y una medida especial para pasillos, es la alfombra para todo uso.
El trenzado y el diseño de este modelo en particular se inspira en fibras vegetales, de modo que tiene un aspecto realmente próximo a una alfombra hecha de paja o mimbre.
Te recordamos las características que son comunes a estas alfombras sintéticas:
- Transmiten una acogedora sensación de naturalidad y calidez.
- Son de fácil limpieza, con escoba, aspirador, paño húmedo o incluso fregona.
- Son resistentes a la humedad y a los cambios de temperatura.
- Son ideales para exteriores, incluso en la cercanía de piscinas por su resistencia al cloro y al agua salada.
- Aguantan incluso sillas de despacho con ruedas.
- Ideales para personas con alergias, porque no acumulan polvo.
- Son flexibles y muy finas, permitiendo el paso de puertas sobre ellas.
Alfombra bicapa (capas independientes) con remate por cinta
Esta alfombra de vinilo está formada por dos capas: el anverso con trenzado de vinilo por un lado, y la base de goma por otro lado. Ambas capas están unidas mediante remate de cinta de poliéster, pero no están pegadas, a diferencia de otros tipos de alfombras termoselladas. Eso significa que aunque ambas capas son impermeables el agua y los líquidos se pueden acumular entre las capas, por lo cual la limpieza deberá realizarse con paño húmedo o fregona escurrida evitando chorros de líquido. Cuando penetren líquidos entre las dos capas se pueden eliminar aplicando presión con toallas o paños absorbentes, o con ayuda de un secador de pelo.