La alfombra infantil que dice: ¡Ah, del castillo!
Si los más pequeños no necesitan gran cosa para dejar volar la imaginación, con esta alfombra infantil con castillo medieval la van a hacer volar tan alto como el dragón que merodea por los alrededores.
Es una alfombra infantil estampada con un gran castillo medieval en el centro, al que no le falta detalle: sus torres, sus almenas, sus banderas que acaban en dos puntas (¿por qué rayos las banderas de los castillos siempre acaban en dos puntas?) y hasta su foso con su puente levadizo.
No sabemos en en el foso habrá cocodrilos, que a lo mejor no es su clima, pero lo que sí vemos es que tiene dragones, porque hay que decir que no hay castillo que se precie que no los tenga. Si el dragón viene a asediar el castillo o a salvar a una princesa escondida en la torre, eso será la imaginación del peque quien lo diga, que ellos saben más que nadie de estas cuestiones.
Por lo demás, se trata de una alfombra del tamaño ideal para que los niños la usen como lugar de juegos: mide 110 cm de ancho por 170 cm de largo. Es acolchada y suave, con su cuerpo de poliéster de 1 cm de grosor. El reverso es de fieltro con aplicaciones de goma, para que sea a la vez suave y antideslizante. Se puede lavar a mano en agua fría, con lo que su mantenimiento es bien sencillo. Las esquinas son redondeadas, a tono con el espíritu desenfadado de la alfombra. El peso es de 600 g por m2.