Una alfombra con la naturalidad y calidez del sisal pero sin ninguno de sus inconvenientes
Si te gustan las alfombras naturales de sisal o de lana, pero tienes miedo a su durabilidad y delicado mantenimiento, esta alfombra de polipropileno o sisal sintético es para ti. Porque reúne todas las ventajas de las alfombras naturales -la calidez, la naturalidad y el tacto- pero sin sus inconvenientes, ya que ofrece una resistencia a toda prueba y una facilidad de mantenimiento extraordinaria.
La alfombra Florida, de un vistazo:
- Composición: polipropileno (91%) y poliéster (9%)
- Grosor 5 mm
- Superficie lisa (alfombra sin pelo)
- Alfombra compacta, firme a la pisada
- Apta para exterior: resistente al agua y a los rayos UVA
- Lavable con agua
Las fibras sintéticas del polipropileno están trenzadas con apariencia de sisal y con un tacto que recuerda a la lana, hasta el punto que creerás que no puede ser sintética. Esto es así gracias a la maleabilidad del polipropileno, que permite trenzar alfombras refinadas y llenas de detalle.
La gran ventaja es que es un material súper resistente, tanto que no solo aguanta el uso intensivo dentro de casa, sino que también es capaz de resistir la intemperie, la lluvia y el sol sin inmutarse, en jardines y terrazas.
Huelga decir que es lavable, no solo con los métodos convencionales como aspirador, sino con un paño húmedo, esponja, o directamente con la manguera si está en exterior (sin agua a presión). Jabón neutro es suficiente, no se deben aplicar productos químicos.
El diseño con una fina espiguilla trenzada de manera deliberadamente irregular le da mucha vida a la vez que la hace discreta. Está pensada para decorar y vestir suelos en casi cualquier lugar, sin importar si es dentro o fuera de casa, si es un dormitorio o un salón, un recibidor o una terraza. Resulta muy natural, de superficie lisa y sin pelo. Se remata con ribete de hilo en los laterales y dobladillo en los fondos.
Para exterior e interior: atrévete a mojarlas, atrévete a limpiarlas.
Las alfombras de polipropileno interior/exterior se limpian fácilmente con agua, esponja, jabón neutro y manguera sin presión. Atrévete a disfrutarla tanto en exteriores como en interiores y no tengas miedo al trote duro o a las manchas.