Una alfombra de chenilla elegante en colores profundos
La rica textura de esta alfombra de chenilla nos muestra un acabado vintage estilo envejecido. En combinación con los colores profundos de la gama, crea ambientes intensos, de una discreta elegancia.
Es una alfombra que combina tradición y modernidad y que se hace acogedora, en gran parte por su confección con tejido de chenilla. Es una alfombra con cuerpo, con un grosor de 8 mm y 1540 g/m2, aunque a pesar de eso fina y de superfice lisa, sin pelo. Lo cual es importante para que no acumule polvo y se limpie con facilidad (se puede incluso lavar a mano en agua fría).
La paleta de colores es variada, con tonos grises y neutros y otros más intensos, como verde, azul y rojo, para que puedas graduar el mapa de calor e intensidad que quieres en tu decoración.
La composición es 27% de algodón, un 53% acrílico y un 20% de poliéster. Tiene medidas variadas para salones y habitaciones, desde la pequeña para los lados de la cama hasta las más grandes para el salón.